top of page

Que el ser humano es más hijo de su tiempo que de sus padres. Que estamos en medio de una tormenta de cambio de paradigma... y que ser parte del cambio es divertido.

Actualizado: hace 6 días


A menudo pensamos que somos el reflejo de nuestros padres. Que su crianza, sus valores y sus decisiones moldearon lo que hoy somos. Y en parte es cierto. Pero creo hoy que hay una verdad aún más poderosa, más invisible y, a veces, más determinante: somos, ante todo, hijos de nuestro tiempo.

Estudié Diseño Industrial, me encantaba la historia y me parecía fabuloso ese principio de siglo, con aviones, coches, máquinas de coser, entre Modernismo, Art Nouveau, Bauhaus y grandes inventos…

Hoy vivimos otro principio de siglo y me pregunto si la velocidad en las que sucede todo, nos permite ser realmente conscientes. (Esto lo digo después de haber tenido un surrealista diálogo con chat Gpt).

Las ideas, los miedos, las tecnologías, las luchas, los discursos, la educación de nuestros hijos...


Todo se tiñe de decisiones, que muchas veces nos activan la ansiedad de no saber, y nuestro sistema de alerta a lo desconocido continuamente activado…


Y este tiempo, en particular, no es cualquier tiempo. Estamos en medio de una tormenta: un cambio de paradigma profundo, global, acelerado. Nada parece ser como antes. Lo que era seguro, ya no lo es. Lo que era verdad, se cuestiona. Los roles, los modelos de éxito, las formas de trabajar, de amar, de vivir... todo está en revisión.

El cambio nos puede generar vértigo…

 ¿Y si voy más despacio y conecto mi super poder de observación? Creo que el cambio puede convertirse en una invitación a crear, a jugar, a explorar nuevas posibilidades. Ser parte de él, en lugar de resistirme… puede ser divertido. 

Porque ser parte de un cambio de era es un privilegio. Nos permite no sólo adaptarnos, sino participar activamente en la construcción de algo nuevo. No hay guión fijo. No hay fórmulas seguras. Hay preguntas abiertas, caminos por descubrir, errores que se convierten en aprendizajes. Hay una humanidad que está repensándose... 

Y aunque la tormenta parezca intensa, bailar bajo la lluvia puede ser divertido…


(Dedicado a la arquitecta-madre que me enseñó y repitió la frase: el hombre es más hijo de su tiempo...muchas veces)

 
 
 

Comentários


Não é mais possível comentar esta publicação. Contate o proprietário do site para mais informações.

¿Crees que podemos colaborar juntos?
Escríbenos, estaremos encantados de conocerte

Muchas gracias por tu interés, pronto contactaremos contigo.

horazul espacio en Barcelona

Carrer Enric Granados 137, 3era 2da

08008 BARCELONA

  • LinkedIn horazul
  • Instagram horazul

© 2024 Creado por Horazul Comunicación

bottom of page